Roberto Vargas Martínez, presidente de la Asociación de Psicólogos de Tecomán, abordó el concepto del padre y su día social, a celebrarse el próximo domingo 16 de junio.

En vísperas de esta conmemoración, reflexiona sobre la evolución del rol paterno y por qué el Día del Padre no se celebra con la misma intensidad que el Día de la Madre.

Vargas Martínez destaca que, al igual que la madre, el rol del padre es fundamental e insustituible en la crianza de los hijos.

Sin embargo, el aporte del padre se caracteriza por fomentar la autonomía, independencia, seguridad personal y autoestima en los niños y niñas, aspectos que complementan el rol tradicionalmente atribuido a la madre.

Con el paso del tiempo y el avance de la tecnología, la forma en que se conmemora el Día del Padre ha cambiado.

Hoy en día, las redes sociales juegan un papel importante en esta celebración, permitiendo que muchos hijos expresen su aprecio de manera virtual. Sin embargo, esta visibilidad también puede elevar las expectativas sobre el rol del padre.

A pesar de los cambios sociales y tecnológicos, el concepto de padre sigue siendo esencial. Vargas Martínez subraya que, aunque en ausencia del padre, la madre puede cumplir ciertas funciones, es crucial que los hijos establezcan vínculos con otras figuras masculinas para cubrir esa falta, aunque difícilmente se sustituye el afecto paternal.

La crianza positiva y el involucramiento emocional de los padres son fundamentales. Antiguamente, se asociaba al padre principalmente con la provisión económica, pero hoy se reconoce la necesidad de que ambos padres compartan responsabilidades tanto económicas como afectivas.

No obstante, muchos padres aún se centran excesivamente en lo económico, descuidando el tiempo y el afecto que deben brindar a sus hijos.

Vargas Martínez enfatiza que como sociedad y como hombres, hay una tarea pendiente: fortalecer la expresión emocional de los padres.

Culturalmente, se ha inculcado que los hombres deben ser menos afectivos que las mujeres, pero es necesario cambiar esta percepción para el bienestar de los hijos.

Finalmente, la diversidad de tipos de familia en la sociedad actual, incluyendo situaciones de violencia, abandono, migración y desconocimiento de los hijos, pone de manifiesto la importancia de trabajar en la aceptación y el manejo de carencias afectivas.

Vargas Martínez lamenta que muchas veces, la ausencia paterna influye en la rebeldía y el consumo de sustancias en adolescentes y jóvenes.