Escribe Yensuni López Aldape
Ser regidor en Tecomán, según los reglamentos, debería ser un trabajo a tiempo completo, digno de compromiso, esfuerzo y dedicación. Pero claro, si hablamos de Tecomán, las reglas de la Ley del Municipio Libre parecen ser más sugerencias que una verdadera obligación.
El artículo 26 de esta ley estipula que los cargos municipales deben ser incompatibles con otros sueldos públicos… pero eso, al parecer, no es más que una vieja recomendación para algunos. Después de todo, ¿por qué conformarse con un solo salario cuando se puede tener dos? Y si el municipio paga, ¿por qué no aprovechar las oportunidades del gobierno estatal también?
Así que, mientras los ciudadanos de Tecomán luchan por pagar sus impuestos y mantener a flote sus negocios, algunos regidores disfrutan de la flexibilidad de trabajar medio tiempo… y cuando decimos “trabajar”, nos referimos a hacer lo que más conviene. Porque claro, un par de sueldos son mejores que uno solo, ¿verdad? ¿Qué importa si la ley dice lo contrario? ¿Y qué pasa si la transparencia en la administración es solo un concepto bonito que, al parecer, no se aplica a quienes ostentan estos “puestos”?
Y si se trata de no faltar a las sesiones de cabildo, no hay de qué preocuparse. Los regidores con doble empleo tienen todo bajo control: las sesiones de cabildo se hacen coincidir a la perfección con sus horarios de trabajo en el gobierno estatal. Un verdadero talento para la planificación y la organización. Lo que podría parecer un problema de falta de tiempo se convierte, para ellos, en una cuestión de flexibilidad. Sin duda, la verdadera definición de eficiencia.
Pero no se preocupen, no todo está perdido. Al final, siempre podemos confiar en los regidores de Tecomán para ser creativos. Tal vez lo que de verdad quieren es que los ciudadanos aprendan a hacer malabares como ellos, combinando múltiples trabajos sin perder el ritmo. Claro, la transparencia, la ética y la legalidad se quedan en el camino, pero ¡no pasa nada! ¿Qué podría ser más divertido que un municipio donde se juega con las reglas a nuestro favor?
La segunda pregunta sería determinar qué instancia, dependencia o autoridad es responsable de vigilar y/o sancionar esta conducta de abuso u “olvido”, y cuándo sería posible que se lleve a cabo dicha acción. O quizás, se trate simplemente de una situación en la que se permitió que al menos tres munícipes tecomenses, pertenecientes a distintos partidos políticos, recibieran sus aguinaldos dobles.
Al final, el verdadero reto es no perderse en esta montaña rusa de salarios y horarios que nada tiene que ver con el servicio público. Pero al menos, ¡podemos decir que en Tecomán ser regidor es como tener un hobby de medio tiempo, con el bono extra de un doble sueldo!