La producción de limón en Colima atraviesa una de las peores crisis de los últimos años. Así lo advirtió Orlando Torres Meza, gerente del Consejo Estatal del Limón, quien señaló que desde hace más de 10 meses los productores están operando con pérdidas constantes.
“El tema está delicado”, dijo en entrevista. “Hemos tenido unos meses muy complicados en cuanto a exportación; sigue habiendo una constante: solo aproximadamente el 20 por ciento del limón que se produce en Colima se exporta. El 80 por ciento restante se queda en México, y una parte de ese porcentaje va a la industria”.
Sin embargo, el precio del limón destinado a la industria no ha sido favorable. “Este último año no ha superado los 23 pesos por kilo, lo que afecta directamente al limón verde que es el que comercializa la mayoría de los productores colimenses”, explicó.
Torres Meza detalló que producir un kilo de limón cuesta alrededor de 8 pesos, pero durante el periodo de junio a octubre del año pasado, se estuvo vendiendo en promedio en 4 pesos. “Eso significa que el productor perdió 4 pesos por cada kilo que vendía. Prácticamente estuvimos vendiendo por debajo del costo de producción”, lamentó.
A esta situación se suma el impacto del cambio climático, con alteraciones en los patrones de producción y severas afectaciones a los árboles. “Antes, producir en invierno era garantía de buen precio. Este año no fue así. No sólo cayó el precio, también la producción no fue la esperada”, mencionó.
La falta de ingresos impidió a muchos productores realizar las aplicaciones necesarias de fertilización y nutrición. “No hubo recursos. La situación económica fue tan complicada que no pudieron hacer las inversiones necesarias a finales del año pasado, y hoy estamos viendo el reflejo de eso: la producción ha disminuido considerablemente”.
El gerente del Consejo del Limón advirtió que la fisiología del árbol también ha cambiado debido a las condiciones extremas de calor y la sequía del año pasado. “Nos ha movido los picos de producción y ha sido un golpe muy fuerte para el productor”.
Con este panorama, Torres Meza aseguró que ya se acumulan cerca de 10 meses en los que el cultivo de limón ha generado pérdidas. “La situación es grave y requiere atención urgente”, concluyó.