Como parte de la campaña de intercambio de juguetes bélicos, el Sistema de Protección a Niños, Niñas y Adolescentes (Sipinna), en colaboración con la fuerza juvenil militarizada, logró recolectar un total de 30 armas de juguete en el Jardín de Niños José Salazar Cárdenas, ubicado en la colonia Luis Donaldo Colosio, en Tecomán. Esta acción busca erradicar la violencia desde una edad temprana y promover una cultura de paz en la comunidad.
Teresa Trejo, titular de Sipinna, explicó la importancia de esta campaña, señalando que muchas veces los padres, sin intención maliciosa, proporcionan a sus hijos juguetes que fomentan conductas violentas, como pistolas o videojuegos de temática bélica. “A veces los padres ven un estuche bonito y no dimensionan lo que están sembrando en los niños. No todos los niños aspirarán a formar parte de una corporación policial; muchos de ellos usan esos juguetes para soñar con ser delincuentes de alto rango”, comentó Trejo.
A través de esta iniciativa, el sistema de protección integral de derechos de niños, niñas y adolescentes busca erradicar estos comportamientos violentos. “Queremos cambiar nuestro contexto, empezando por fomentar una cultura de paz y evitar la compra de este tipo de juguetes. Podemos comenzar con los más pequeños”, añadió la titular de Sipinna.
Durante la jornada, los niños intercambiaron sus armas de juguete por un bolo de dulces y un juguete educativo que favorece su desarrollo y formación sana. Trejo destacó que, aunque la recolección de armas de juguete fue exitosa con 30 unidades recogidas de una población de 70 niños, no toda la comunidad infantil tiene este tipo de juguetes, ya que muchas niñas no suelen poseerlos. Aun así, la actividad incluyó dinámicas preventivas para todos los niños, padres y autoridades presentes.
El evento, realizado en un entorno complicado, fue considerado un éxito por las autoridades, quienes esperan continuar con estas acciones en otras localidades de Tecomán. “Escogimos este jardín de niños por su contexto, pero creemos que el trabajo realizado dará frutos, y seguiremos generando más campañas como esta”, comentó Trejo.
Además, la campaña también visibiliza el papel fundamental de los padres en la educación de los niños, destacando que, en muchos casos, son los propios padres quienes exponen a los menores a situaciones de violencia, lo que afecta su desarrollo emocional y social. “No se vale que los papás mismo o los padrastros e incluso personas ajenas a la familia violenten esos espacios. Buscamos canalizar estos casos a las instancias correspondientes”, agregó.
Concluyó señalando que este tipo de acciones son un paso importante hacia la construcción de un entorno más seguro y saludable para los niños, donde la paz y el respeto sean los valores predominantes.