El cultivo de coco en Armería se encuentra en una situación crítica, admitió el líder cococultor Mauricio Barreto Peralta quien destacó la necesidad urgente de reestructurar el sector. La falta de planificación y regulación han llevado a que la producción local se vea gravemente afectada, obligando a la región a depender del coco importado de Guerrero.
Barreto Peralta señala que la reconversión a otros cultivos ha disminuido drásticamente la producción local de coco. A su juicio, esta situación se ha agravado por la aparición de plagas como el picudo prieto, que ha devastado plantaciones enteras. “Es triste y costoso para los productores ver cómo sus plantas mueren antes de florear”, comenta, subrayando la desmotivación que sienten los agricultores ante este panorama incierto.
Además, Barreto enfatiza que el municipio cuenta con el potencial necesario para ser autosuficiente en la producción de coco. A pesar de que hay un mercado significativo para los productos derivados del coco, la falta de una planificación adecuada ha impedido que se aprovechen estos recursos. “La gente de Armería sabe trabajar el coco; esta es su fuente de empleo”, añade Barreto, haciendo un llamado a las autoridades para que implementen estrategias que favorezcan la producción local y reduzcan la dependencia del coco de Guerrero.
Según los últimos censos, hay entre 12,000 y 13,000 hectáreas disponibles en cultivo de coco, pero muchas de ellas están desatendidas y no cumplen con las condiciones necesarias para una producción efectiva. “Debemos apostar al cultivo del coco para evitar problemas futuros”, concluye Barreto, subrayando la importancia de tomar acción inmediata para revitalizar este sector y garantizar un futuro sostenible para la economía de Armería.
Barreto también destaca la importancia de establecer regulaciones que fomenten la sanidad y la salud de las plantaciones, lo que incluye aplicar estrictamente las leyes de sanidad vegetal. “Sin una regulación efectiva, es difícil erradicar los focos de infección y garantizar un entorno productivo saludable”, afirmó.