Tarea Política

Conspiración peraltista

 José Luís Santana Ochoa  Opinión

Al Partido Acción Nacional en Colima le tarda mucho tiempo en caer el veinte. Tuvieron que pasar doce largos meses para que sus dirigentes descubrieran la conspiración orquestada por José Ignacio Peralta para cobrarles a la mala, a lo chino,  la paliza electoral que sus candidatos le propinaron a él y a sus compañeros de fórmula en las elecciones del domingo 07/06/2015. El primer golpe perpetrado con cañonazos peraltistas de millones de pesos provenientes de los bolsillos de los colimenses fue la cooptación de los mercenarios diputados locales ahora priindependientes Nicolás Contreras Cortés, Francisco Ceballos Galindo y Luis Ayala Campos. El segundo, el amancebamiento de Riult Rivera Gutiérrez, Julieta Jiménez Angulo y Crispín Guerra Cárdenas, trio que tuvo que abrirse de capa, descararse, en el affaire Rafael Mendosa Godínez, alcalde panista de Cuauhtémoc a quien la pandilla liderada por el casi seguro Record Guinness Cevichero le aplicó por sus pistolas la muerte política  en el ámbito electoral local cuando de una simple amonestación pública o separación temporal del cargo no debió haber pasado.

Hay que recordar que el mismo ajusticiado alcalde cuauhtemense hace semanas expresó que tuvo la corazonada de que le iban a dar cuello. Para tratar de librar la guillotina peraltista sucumbió ante las amenazas que le hizo la excandidata a presidenta del CDE del PAN, Julia Jiménez Angulo, obligándolo a mantenerse al margen del reciente proceso electivo interno panista.  “De hecho en el proceso interno yo me mantuve al margen por lo mismo, porque prácticamente ya se me había amenazado de que si yo participaba, ahí tenía un proceso (…) que me acordara que yo tenía un proceso”, confiesa quien a pesar de haber ‘copelado’ le dieron cuello los cómplices de Julia. Al menos el chino Le Zhenli Ye Gong no ‘copeló’. Por blandengue quedó como el gallo chinampo.

Nadie descalifica la sentencia SER-PSD-6/2016 emitida por  del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación que instruye al Congreso del Estado a  proceder conforme a derecho contra Rafael Mendoza Godínez, alcalde de Cuauhtémoc, por violaciones a la normativa electoral cometidas en enero de 2016, pero se les pasó la mano a los diputados locales peraltistas al separarlo inmediata  y definitivamente del cargo e inhabilitarlo para ocupar otros equiparables en los próximo siete años, sanción a todas luces desproporcionada. La orden emitida por Sala Regional Especializada en Materia Electoral  obligaba al Congreso del Estado a llevar a cabo un procedimiento que derivara en una sanción, en un castigo, que pudo haber sido amonestación pública, multa económica, vestirlo de charro o china poblana, emplumarlo, tiznarlo, pero nunca jamás fusilarlo políticamente como lo han hecho. Definitivamente se les pasó la mano. Y es que el proselitismo realizado por Mendosa Godínez a favor de Preciado Rodríguez no fue determinante para el resultado de le elección extraordinaria que ganó por muy amplio margen José Ignacio Peralta.  

El mismo golpista Riult  Rivera Gutiérrez se cura en salud ante la corrección de plana que pueden recibir  quienes se ensañaron con Rafael Mendosa Godínez,  al apuntar que el Supremo Tribunal de Justicia del Estado, erigido en Jurado de Sentencia, “deberá calificar la actuación del propio Congreso del Estado, y de encontrar algún tipo de elemento que considere inadecuado, tendrá que hacer los señalamientos jurídicos correspondientes”.

El alcalde Mendosa Godínez continúa en funciones en espera del desenlace final de la conspiración peraltista. A pesar de que se le movió el cuero poniendo con ello en riesgo el triunfo de Enrique Michel Ruiz, el Comité Directivo Estatal que preside lo apoyará jurídica y políticamente a morir. Además de presentar  una Controversia Constitucional ante el Supremo Tribunal de Justicia de la Nación, tramitar amparos ante la Justicia Federal e   impugnar el resolutivo de marras ante la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, “apoyará las manifestaciones que decida el pueblo de Cuauhtémoc en defensa de su alcalde”. No coman ansias, la madre de todas las batallas del PAN-Colima contra la “ofensiva gubernamental en los momentos en que el PAN estaba tratando de construir puentes de entendimiento con el Gobierno”, apenas empieza. Y José Guadalupe García Negrete, presidente municipal de Tecomán, puesto y dispuesto está a entrarle al mismo baile.

EL ACABO

*Para la Delegada Especial del PRD en Colima, Martha Zepeda del Toro, el Congreso del Estado fue utilizado como un instrumento para revanchas políticas contra el alcalde Rafael Mendoza Godínez; debió haberse llevado un procedimiento administrativo en lugar de un juicio político; la participación de Rafael no influyó en el resultado de la elección; y la sanción ameritaba amonestación o, si acaso, una suspensión temporal porque no hubo desvíos de fondos y su participación no influyó en los resultados de la elección”. A ver quién la contradice, pero con argumentos sustentados, no con vociferaciones. 

*Las cosas como son: la burda, desaseada y delincuencial intervención del desesperado José Ignacio en la vida interna del PAN-Colima; la cooptación de media docena de diputados locales blanquiazules que ha hecho con dinero del pueblo; y el golpeteo sistemático con todos los medios a su alcance de los alcaldes también panistas de Colima, Héctor Insúa García; Coquimatlán, Orlando Lino Castellanos; Cuauhtémoc, Rafael Mendosa Godínez; y Tecomán, José Guadalupe García Negrete, evidencian a un gobierno que privilegia los golpes sucios, bajos,  sobre la civilidad y el libre juego democrático.

*Los priistas cuauhtemenses no deben echar las campanas al vuelo al creer que tienen ya allanado el camino para regresar a la alcaldía de su municipio con la hermana de la senadora ‘juanita’  Mely Romero Celis. Aún en el supuesto de que lograran impedirle a Rafael Mendosa Godínez contender por la reelección, éste les volverá a ganar la partida en 2018 con otro buen candidato o candidata que llegue a respaldar. Al tiempo.

bv