“Existen una cantidad significativa de abogados que siguen en el ojo del huracán por llevar casos de gente inmiscuida en la delincuencia y son sumisos, antiéticos, arrastrados y lamebotas de los gobiernos en turno en sí, unos viles siervos que tan sólo piensan en su bienestar”.

Así se expresó Efraín Naranjo Cortés, representante en la entidad de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos quien agregó que pese a que tienen especialidades, maestrías, doctorados y licenciaturas carecen de honestidad, responsabilidad y credibilidad.

Lamentó que de un tiempo a la fecha, se den desapariciones y asesinatos de abogados. Con ello queda en claro que “la Universidad de Colima no prioriza la ética”.

“Los hacen entrar a una dinámica materialista y ambiciosa por lo que son seducidos fácilmente para que caigan en los negocios turbios, con el eminente riesgo de causarles la muerte”.

“Aún no puedo olvidar la desaparición de mi colega abogado Zeferino Hueso, estudiamos juntos en la Facultad de Derecho de la Universidad de Colima”, subrayó.

Del mismo modo, dijo que él no lleva asuntos de gente que anda inmiscuida en la delincuencia y eso “se lo dejé bien en claro en su momento a Jesús Antonio Sam López, quien fue procurador de Justicia en el mandato de Fernando Moreno Peña, para que no diera pie que me habían matado por andar en negocios turbios”, puntualizó.

Efraín Naranjo señaló que en la asociación a su cargo nunca revindican a los abogados antiéticos y siervos ya que carecen de honradez y anteponen el beneficio personal y familiar.