La Secretaría de Salud y Bienestar Social informó de la suspensión inmediata de 11 centros de rehabilitación, debido a que se identificaron “anomalías de alto riesgo, que ponen en peligro la salud e integridad de los usuarios”. Algunos de estos centros de asistencia operaban desde el 2008.
La dependencia justificó que mantiene “la vigilancia y el
fomento sanitario en los centros de rehabilitación privados para que de manera
paulatina se acerquen al cumplimiento de la normativa aplicable para la
prevención, tratamiento y control de las adicciones y la Ley para la
Prevención, Tratamiento y Control de las Adicciones en el Estado de Colima”.
Estos centros deben en contar para su operación con avisos
de funcionamiento y de Responsable Sanitario, emitidos por parte de la
Coespris, así como con el registro como institución especializada ante la
Comisión Nacional contra las Adicciones.
La dependencia reportó que dentro del seguimiento de
vigilancia sanitaria se han otorgado plazos para la corrección de las anomalías
encontradas, tal como se dispone en el artículo 430 de la Ley General de Salud.
Asimismo, se vigila que los centros cuenten con un programa de
trabajo aprobado por la CONADIC y avalado por el Centro Estatal contra las
Adicciones, donde se contemple tratamiento médico y psicosocial; un reglamento
interno, manuales técnico-administrativos y guía operativa de referencia y
contrarreferencia a otros establecimientos de mayor complejidad, de acuerdo con
el cuadro clínico.
Además, “se constata el perfil del personal que labora en
ellos, la ausencia de hacinamiento, que se promueva el trato digno, que se
cuente con la plantilla de personal especializado, que la alimentación
proporcionada sea de calidad sanitaria y balanceada, por mencionar los aspectos
de mayor riesgo”.
Refirió que se sostienen reuniones con los representantes de
los centros de tratamiento en adicciones residenciales, acordando que los
centros no pueden funcionar antes de contar con las autorizaciones respectivas,
por parte de la Coespris, CECA y Ayuntamientos.
Por ello, deben contar también con instalaciones específicas
y especiales: ambiente físico apropiado y seguro; trabajo conjunto con
familiare, dormitorios separados por sexo y suministro de medicamento solo con
prescripción médica.