Luis Ayala Campos, diputado y presidente de la Comisión de
Desarrollo Rural y Fomento Agropecuario y Pesquero, aseguró que cada vez es más
difícil la situación de los pescadores en Manzanillo, ya que no reciben los
apoyos, además de estar limitados en su trabajo por las vedas deportivas.
En entrevista el legislador panista expuso que es caótica la
situación de los pescadores porteños, quienes se han visto en la necesidad de
realizar protestas para ser escuchados en sus demandas.
“Esto no puede seguir así, los pescadores están muy
molestos, pero les dan atole con el dedo, les van motores de lancha a algunos
cuantos y los políticos se quedan con la mayoría de las cosas, con implementos
de pesca, pero realmente a quien necesita los apoyos no se los dan, se los dan
a unos cuantos para llenar el requisito”, apuntó.
Indicó que que los
pescadores del puerto de Manzanillo están olvidados para las autoridades
estatales y federales, por lo que corren el riesgo de perder su fuente de
ingresos ante la falta de apoyos y acciones.
El diputado apuntó que el problema de las dependencias
estatales y federales que atienden al sector es que no verifican que los apoyos
lleguen a quienes realmente lo necesitan y esto genera un descontento.
Por ello dijo que estará impulsando desde el Congreso del
Estado que se generen delegaciones especiales de la Secretaría de Desarrollo
Rural (SEDER) que se ubiquen en los lugares donde se desarrolla la actividad y
puedan así trabajar más cercano a quienes desarrolla la actividad, en este caso
la pesca.
“Todos tenemos que vigilar que se haga un buen trabajo, una
buena repartición de los apoyos, pero sobretodo que dejen de lucrar con el
hambre del pueblo. Los principales afectados son los pescadores rivereños que
han hecho paros”, abundó.
Asimismo estableció que debe levantarse la veda deportiva,
porque dijo que esto promueve que importe especies de otros lados, dejando sin
posibilidad de crecimiento económico a un sector importante en la entidad.
“La pesca deportiva no los deja salir solamente después de 50 millas, mientras que a México llegan de Sudamérica Vela y Marlín empaquetados para su consumo en el país; es el desorden y en Manzanillo también se da”.