En la Secretaría de Salud y Bienestar Social se busca
aumentar la protección contra la enfermedad inmunoprevenible con el mínimo
riesgo de reacciones, mediante una vigilancia pasiva y permanente para
garantizar la seguridad y calidad de las vacunas.
En el marco de la Semana Mundial de la Inmunización, misma
que tiene el objetivo de fomentar el uso de las vacunas para proteger a las
personas contra varias enfermedades, la dependencia indicó que los hospitales atienden, dan seguimiento y
notifican, a través de unidades de farmacovigilancia, las reacciones adversas
que pudieran presentar los pacientes por medicamentos, vacunas o insumos para
la salud.
Para garantizar la seguridad y calidad de una vacuna,
mencionó que la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios
trabaja en coordinación con el Programa de Vacunación Universal (PVU), a fin de
notificar las reacciones adversas que se presentan por vacunas.
Al respecto, mencionó que la NOMN 036-SSA2-2012 “Prevención
y control de enfermedades. Aplicación de vacunas, toxoides faboterápicos
(sueros) e inmunoglobinas en el humano”, indica que los eventos supuestamente
atribuibles a la vacunación o inmunización se notifican al sistema de
vigilancia pasivo, incluyendo instituciones públicas y privadas.
Con ello, añadió, se busca que la vacunación sea una
protección frente al desarrollo de la enfermedad, muy superior al riesgo de
presentar una reacción adversa por su administración, particularmente en los
niños.