El narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán, jefe del cartel de Sinaloa, se fugó de la cárcel del Estado de México (centro del país) en la que estaba recluido desde su detención en febrero de 2014, en lo que supone la segunda vez que escapa de una prisión mexicana, informaron hoy fuentes oficiales.
En un comunicado, la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) señaló
que la fuga, la segunda del narcotraficante de una cárcel tras la que
protagonizó en 2001, se produjo “a las 20:52 horas” del sábado y la última vez
que se vio al preso fue cuando acudía al baño de la penitenciaría.
“A las 20:52 horas del día de hoy (sábado), en el Sistema
Permanente de Vídeo vigilancia del Penal Federal del Altiplano I, se observó
que Joaquín Guzmán Loera se aproxima al área de la regadera dentro de la
estancia 20 del pasillo 2, donde habitualmente, además de su aseo personal,
lavan sus enseres”, indica el comunicado.
La cárcel Altiplano es una prisión federal ubicada en
Almoloya de Juárez, en el Estado de México, a 25 kilómetros de Toluca, la
capital estatal, y a unos 90 kilómetros de Ciudad de México.
Según la CNS, “al prolongarse la no visibilidad del interno,
se ingresa a la celda, la cual se encontraba vacía, por lo que de inmediato se
emitió la alerta correspondiente por la probable evasión del mencionado
recluso”.
“Así se inició el
protocolo correspondiente, con lo que se confirma la fuga de Guzmán Loera”,
agrega la nota.
Con vistas a volver a detener al narcotraficante, la CNS
explica que “se ha desplegado un operativo de localización en la zona y en las
carreteras de los estados circunvecinos”.
“Asimismo, se han suspendido operaciones aéreas en el
aeropuerto de Toluca”, concluye el comunicado.
Nacido en 1957, Joaquín Guzmán Loera, alias El Chapo,
comenzó su carrera criminal en la década de 1980 como lugarteniente de Miguel
Ángel Félix-Gallardo, jefe del cártel de Guadalajara, cuya detención en 1989 le
llevó a fundar su propia organización en Sinaloa, su estado natal.
En 1993 fue capturado en Guatemala, país del que fue
extraditado a México y el 19 de enero de 2001 se fugó de la prisión de Puente
Grande, estado occidental de Jalisco, a bordo de un camión de limpieza gracias
a la ayuda prestada por algunos funcionarios del penal.
Su última detención, el 22 de febrero de 2014, fue
considerada el mayor golpe asestado al narcotráfico en México en una década,
pues Guzmán era el criminal más buscado tanto por México como por Estados
Unidos.