El ejército de Estados Unidos lanzó este jueves un ataque con misiles de largo alcance sobre las bases aéreas en Siria, en respuesta al ataque con armas químicas prohibidas presuntamente realizada por el gobierno sirio.

Este ataque, del cual no se ha determinado un culpable, tuvo como consecuencia la muerte de al menos 100 personas el martes, dijeron funcionarios militares estadounidenses a NBC News.

Los militares estadounidenses dispararon al menos 50 misiles Tomahawk con objetivo a una base aérea en Ash Sha'irat, en la provincia de Homs, al oeste de Siria, desde donde se supone provino el ataque químico, dijeron las autoridades.

Fue el primer ataque directo estadounidense contra el gobierno sirio y la orden militar más drástica de Donald Trump desde que llegó a la presidencia.

El ataque sorpresa marcó un notable cambio de rumbo para Trump, quien cuando era candidato criticó que Estados Unidos se haya involucrado en la guerra civil siria, ahora en su séptimo año.

Varios portales de Estados Unidos señalaron que el principal motivo de esta reacción fueron las fotografías y los videos de niños muertos a causa del ataque químico, lo que calificó como “una deshonra para la humanidad” que cruzó “muchas líneas”.

Minutos antes de la ofensiva estadounidense, Rusia advirtió a Estados Unidos de las “consecuencias negativas” que tendría una acción militar directa en Siria en respuesta al ataque químico.

“Hay que pensar en las consecuencias negativas. Toda la responsabilidad, si hay una acción militar, estará sobre los hombros de aquellos que la inicien”, dijo a los periodistas el embajador ruso ante la ONU, Vladimir Safronkov.